miércoles, 16 de febrero de 2011

Y vuelve El Sr. López



Por primera vez en mucho tiempo tengo un serio problema para escribir y le voy a contar por qué: No es algo que se derive de una falta de información sino que sucedieron muchas cosas, prácticamente todas me “llenaron el ojo” y pienso que sería superfluo tratar de escribir acerca de cada tema porque nos llevaría a nada. 

Ya ha bajado la euforia mundialista, se ha ido la copa a España donde curiosamente los holandeses contribuyeron demasiado para que los jugadores de aquella liga hoy en día se jacten durante cuatro años de ser campeones. 

Pero eso, al menos para cuando este texto sea publicado y usted lo tenga en sus manos posiblemente formará parte de una anécdota. 

Tan pronto como la famosa Puerta de Alcalá se cimbraba con cánticos que ensalzaban a Iniesta, en nuestro país Andrés Manuel volvió de las cenizas para declarar que sus aspiraciones lo colocaban nuevamente como candidato presidencial, pero cometió el error de no avisarles a Marcelo Ebrard y a Jesús Ortega quienes por ende no supieron manejar la situación con claridad. 

Me parece -con la salvedad de lo que usted pueda pensar- que el mismo político tabasqueño debe reenfocar la visión sin llegar a traicionar su esencia. 

Si pensamos un poco, esta especie de “poder” que ejerce para generar comentarios unos segundos después de escucharle se parece mucho al “don” que ostenta un personaje definido como “el que no debe ser nombrado” y esto no le conviene si quiera de manera mínima. 

El juego político bien entendido resulta ser interesante, sobre todo si éste tiene una firme estructura, una en la que los tiempos son medidos y significan factor a tu favor sin importar cuán obsoleta es tu visión del acontecer actual o la rigidez de la estrategia. 

Eso lo sabe López Obrador y mueve sus piezas con cuidado para no caer, por eso hizo voto de silencio en la situación de Oaxaca con Gabino Cué, esa es la razón por la cual poco o nada supimos acerca de él, porque medita y sabe estabilizar o desestabilizar en el momento conveniente. 

El nerviosismo fue bárbaro, brutal diría yo. Más allá de todo pacto “de caballeros” la izquierda debe llegar unida si quiere apostar por lo grande, debe evaluar no solo el desempeño actual sino el empuje y arrastre de sus “presidenciables”. No es el lugar y mucho menos el tiempo para el uso de la palabra, hay que abrir espacio para las acciones. 

Aquí, los lugares a los que puede hacer llegar sus comentarios: 

http://twitter.com/AzoteOficial 

http://www.facebook.com/pages/Alejandro-Garcia-Rueda/343310899017?ref=ts

No hay comentarios:

Publicar un comentario